Luz de manzana
Pulpa abierta
Golondrina encantada.
Franqueas mis huesos
Columpias mis venas
Retuercen tus manos
Con libertina cadencia.
Torturas mi nido
Desestabilizas mis horas
Anegas agonías
Con húmeda lengua.
Chocolate espeso
Imán carnal
Configuras tu asalto
a mi arcaica vanidad.
Sobre ti, debajo de ti
hinchas el deseo
Quiebras la vulgaridad:
Yo, el tornado… tú, la mar.
Pecho tatuado de bosque
brazos de loba lunar
marea roja crecida al poniente
hermética mujer de sal.
Este poema, titulado "Oda a una mujer tatuada", es una exaltación apasionada y sensual de una figura femenina que parece combinar fuerza, misterio y erotismo. A lo largo del poema, el hablante poético va entrelazando imágenes físicas y emocionales para transmitir la poderosa influencia que esta mujer ejerce sobre él. A continuación, exploro sus significados estrofa por estrofa:
1. "Ensimismada estatua / Luz de manzana / Pulpa abierta / Golondrina encantada."
El poema comienza con una serie de imágenes contrastantes que sugieren tanto quietud como vitalidad. La "ensimismada estatua" transmite una sensación de inmovilidad y reflexión interna, mientras que la "luz de manzana" y la "pulpa abierta" evocan algo vivo, fresco y lleno de vida. La "golondrina encantada" añade un toque de ligereza y libertad, sugiriendo una mujer que es, al mismo tiempo, distante y etérea, pero también profundamente conectada con su sensualidad.
2. "Franqueas mis huesos / Columpias mis venas / Retuercen tus manos / Con libertina cadencia."
En esta estrofa, la mujer penetra profundamente en el ser del hablante ("franqueas mis huesos"), afectando no solo su cuerpo, sino también su esencia interna. La "libertina cadencia" indica un movimiento libre, sin restricciones, que sugiere una energía erótica y desinhibida. La manera en que "columpia" las venas del hablante implica que ella tiene un control total sobre él, manipulando su vida emocional y física.
3. "Torturas mi nido / Desestabilizas mis horas / Anegas agonías / Con húmeda lengua."
El uso de la palabra "torturas" refleja el impacto perturbador que tiene la mujer sobre el espacio interior (el "nido") del hablante. Ella altera su mundo, desestabiliza su tiempo y provoca una especie de caos emocional, pero lo hace de manera intensamente sensual ("con húmeda lengua"). Aquí, el lenguaje mezcla sufrimiento y placer, en una especie de agonía placentera.
4. "Chocolate espeso / Imán carnal / Configuras tu asalto / a mi arcaica vanidad."
La mujer es comparada con un "chocolate espeso", una metáfora que sugiere algo denso, irresistible y dulce, pero también con una riqueza oscura. El "imán carnal" refuerza la idea de atracción física ineludible. Ella asalta la "arcaica vanidad" del hablante, lo cual puede interpretarse como un ataque a su ego o a una parte de él que es rígida o está anclada en el pasado. Ella lo transforma y lo mueve de su centro.
5. "Sobre ti, debajo de ti / hinchas el deseo / Quiebras la vulgaridad: / Yo, el tornado… tú, la mar."
Esta estrofa describe una relación de poder dinámica y mutua. Estar "sobre ti, debajo de ti" sugiere la intimidad física, pero también un juego de posiciones y dominación compartida. La mujer tiene la capacidad de "hinchar el deseo" y destruir la vulgaridad, elevando la pasión a algo más profundo y significativo. La comparación final entre el hablante y la mujer como "tornado" y "mar" es poderosa: el tornado es intenso y caótico, mientras que el mar es vasto y profundo. Ambos se complementan en su intensidad, pero de manera diferente.
6. "Pecho tatuado de bosque / brazos de loba lunar / marea roja crecida al poniente / hermética mujer de sal."
El "pecho tatuado de bosque" y los "brazos de loba lunar" son imágenes que evocan la naturaleza salvaje y mística de la mujer. Ella es tanto terrenal como lunar, lo cual sugiere una conexión con el ciclo natural y el instinto. La "marea roja crecida al poniente" puede referirse a la intensidad emocional o a la sangre, la vida, lo femenino, mientras que la "hermética mujer de sal" sugiere un misterio impenetrable, algo que el hablante no puede descifrar del todo, pero que lo atrae inevitablemente.
Este poema es una oda cargada de imágenes sensuales y simbólicas, en la que el hablante se deja llevar por la poderosa y cautivadora influencia de una mujer tatuada, que se presenta como una figura tanto mística como erótica. La mujer en cuestión no solo posee una belleza externa, sino también un misterio profundo que desestabiliza al hablante y lo transforma.
A través de metáforas naturales y carnales, se sugiere una relación de deseo intenso, donde se mezclan placer y tormento. La estructura y el lenguaje del poema refuerzan la idea de una atracción irresistible, donde el hablante se siente abrumado, pero también fascinado por la fuerza y el poder de esta mujer.
En resumen, el poema explora la complejidad del deseo y el impacto que una figura femenina enigmática puede tener sobre el alma y el cuerpo del hablante.
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